Xerojardinería

Este año ha sido excepcionalmente seco y las altas temperaturas que aún se registran a pesar de las fechas a las que estamos hacen presagiar que no es algo que vaya a cambiar. El cambio climático es algo que ya no puede negarse y todos podemos añadir nuestro granito de arena. Por ello la xerojardinería es cada vez más necesaria y está cada vez más extendida.

La xerojardinería es la suma de técnicas de jardinería enfocadas al ahorro de agua y recursos naturales como puede ser pesticidas y abonos.

Cada vez mas el agua se vuelve un recurso más escaso y muchas veces la malgastamos de manera innecesaria. Por ejemplo, lo más normal es instalar un sistema de riego conectado a la red general de agua. ¡Pero las plantas no necesitan agua potabilizada! Es más, el cloro que usamos para potabilizar el agua que nosotros bebemos no las viene nada bien.

Economizar agua en tu jardín es mucho más fácil de lo que crees.

Aquí te damos 9 pautas para ayudarte a economizar agua en tu jardín:

1. A cada tipo de planta le gusta un tipo determinado de suelo. Conoce la composición del suelo de tu jardín para así poder elegir las especies que mejor se adapten a él. Tus plantas crecerán más y mejor.

2. En relación con el punto anterior, es mejor que elijas especies que se adapten al clima de donde vives o mejor aún que sean autóctonas.

3. Planifica tu jardín de manera que las plantas queden agrupadas según sus necesidades de riego. Así podrás adaptar el sistema para regar “lo justo y necesario” para cada especie y evitarás regar en exceso especies que no necesitan tanto agua.

4. No riegues con mucha frecuencia, acostumbra a tus plantas a riegos en abundancia pero espaciados, tus plantas se volverán más resistentes a la seguía.

5. Igualmente, es mejor que establezcas un calendario de riego y lo sigas de manera estricta para ayudarte a regar cada planta según sus necesidades.

6. El césped exige una gran cantidad de agua. Evita plantarlo en zonas donde no sea necesario, como márgenes y pendientes y elige especies de césped más eficientes en el consumo de agua.

7. Adapta el sistema de riego para que el agua se distribuya de manera diferente según las zonas a regar. Puedes combinar el riego por aspersión con el riego por goteo que es más eficiente.

8. Para regar puedes usar las llamadas “aguas grises” que son las que provienen de la limpieza de tu casa, de tu lavadora, de la ducha… siempre que uses jabones ecológicos y no uses productos tóxicos para las plantas como la lejía o el amoniaco. Una buena idea es recoger el agua que dejas correr en la ducha hasta que la temperatura sea la deseada.

9. Usa acolchado sobre tus plantas para evitar la pérdida de humedad por evaporación. Además evitarás la proliferación de malas hierbas con lo que tendrás que aplicar menos herbicidas.

Los mejores resultados se obtienen si todo el mantenimiento del jardín esta orientado al ahorro de agua. Debes favorecer el desarrollo de las raíces para que tus plantas resistan mejor la sequía. La poda debe ser mínima, dejando que las plantas crezcan de manera natural para que sean más resistentes y necesiten menos abonos y pesticidas.