En estos meses los
geranios y gitanillas están por todas partes. Sus bellos colores y
la facilidad de cultivo la convierten en la reina de de todos los
balcones y terrazas de las ciudades y en estos últimos años
conquistan las paredes de numerosos comercios de la ciudad.
Si eres fan de esta
planta tan nuestra, te gustará saber que cuanto más estrecha sea su
maceta, más copiosa será su floración, así que si quieres una
floración espectacular deberías escoger macetas de porte alto. Y si
si temes olvidarte regarla, aunque es una planta austera con el
riego, ya dispones de macetas colgantes con autoriego que te
permitirán mantenerla a pleno sol para que pueda florecer sin
problemas hasta el otoño. Si te gusta cultivar tus geranios en
macetas colgantes o ancladas a la pared, ¡no tendrás que
descolgarlas continuamente para regarlas!
Pero si eres de las
personas a las que les gusta ir contra corriente, te proponemos siete
ideas para llenar tus muros, terrazas o balcones de maravillosas
cascadas de flores.
Fuente: Amédée Masclef (dominio público via wikipedia.org) |
1
Madreselva (Lonicera caprifolium)
Es una trepadora
“todoterreno” que crece muy rápido y puede alcanzar en sólo dos
o tres metros de altura, llegando a los 6 si no se controla. No
todas las variedades se cultivan bien en maceta pues muchas de ellas
tienen raices demasiado vigorosas para ello, las mejores variedades
para ellos son la “Gold Flame”, la “Albéric Barbier” y la
“Veilcheriblau”. Pregunta en tu Centro de Jardinería por las
variedades que mejor se adaptan a tus necesidades. Esta especialmente
indicada si quieres cubrir rápidamente una superficie. Aunque
aguanta bien la sombra, florecerá mejor a pleno sol, en lugares de
semisombra bastante calurosos. Si la tratas adecuadamente florecerá
desde principios de primavera hasta bien entrado el otoño.
2
Jazmín de invierno (Trachelospermum jasminoides)
Fuente: By Wouter Hagens (Own work) [Public domain], via Wikimedia Commons |
Es una trepadora que
necesita suelos fértiles y frescos. Al principio crece lentamente,
pero con el tiempo puede alcanzar un gran tamaño, por lo que tendrás
que podarla con frecuencia, sobre todo después de la floración para
asegurar la floración del año siguiente. Florece en primavera,
verano, e incluso en otoño. Debe colocarse a la sombra pero con una
buena iluminación, pero no directa. Es una planta resistente al
frío, pero no tanto al calor sobre todo si es húmedo.
Debes regarla
regular pero no abundantemente, más o menos cada 3-4 días.
Fuente: By Joseph Paxton (1803-1865) [Public domain], via Wikimedia Commons |
3
Pendientes de la reina (Fuchsia x hybrida)
Estas plantas
originarias de América (En Chile y México aún crece de forma
salvaje) son fáciles de cultivar siempre que cuenten con un suelo
rico y humífero, incluso calcáreo.
Esta es la mejor
época para que adquieras ejemplares pequeños que podrás adaptar
poco a poco a su ubicación definitiva, ya que llevan mal los
traslados si son adultos. Para ayudarlas a adaptarse deberás
proporcionarlas mucha luz y humedad. La tierra de su maceta debe
estar siempre húmeda, por lo que deberás regarla a diario en verano
y menos frecuentemente en invierno. También deberás abonarla con
fertilizantes de absorción lenta pues la tierra se empobrecerá
rápidamente. En marzo deberás eliminar sus ramas secas y esperar
al otoño para podarla. Es imprescindible que la protejas de las
heladas.
Fuente: William Curtis [Public domain], via Wikimedia Commons |
4
Dondiego de día (Ipomoea purpurea)
Como todas las
campanillas, es una planta trepadora que alcanza 2-3 metros de
altura. Necesita temperaturas suaves (no aguanta menos de 5ºC),
aunque si vives en zonas frías puedes cultivarla como anual, ya que
florece desde marzo a julio.
No debe exponerse al
sol directo y debe regarse de forma moderada.
Fuentes: By Hans-Simon Holtzbecker [Public domain], via Wikimedia Commons |
5
Pasionaria (Passiflora incarnata)
Esta trepadora que desarrolla magníficas flores muy vistosas y
llamativas, que contrastan muy bien con el verdor de sus hojas, puede
llegar hasta los 6-9 metros de longitud.
Puede llegar a aguantar los -5ºC bajo cero aunque es mejor no
exponerlas a temperaturas tan bajas, sobre todo si es una planta
joven. Es mejor que la cubras durante el invierno.
Necesita suelos francos, ricos y siempre húmedos, pero bien drenados
para evitar encharcamientos. Lo mejor es que acolches el sustrato
para mantener la humedad más tiempo. Deberás abonarla
frecuentemente y mantenerla en un entorno con mucha luz.
Esta planta puede
alcanzar entre 60-150 cm de altura puede ofrecer flores de diferentes
colores simultáneamente, e incluso flores individuales salpicada de
varios colores. Otro fenómeno curioso que ofrece es el cambio de
color de las flores según la planta envejece.
Sus flores comienzan
a abrirse a partir de la tarde, produciendo una fuerte y dulce
fragancia y se comienzan a cerrar al mediodía.
Necesita
temperaturas templadas, no aguanta la más mínima helada y es muy
sensible a las corrientes, por lo que si donde vives hace las
temperaturas bajan por debajo de los 0ºC o suele haber viento no
debes intentar cultivarla en exteriores.
Debes tener cuidado
pues es bastante invasiva si no se controla.
Fuente: By Anneli Salo (Own work (Own photo)) [CC BY-SA 3.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0)], via Wikimedia Commons |
7
Guisante de olor (Lathyrus odoratus)
Es una trepadora
anual de hoja caduca que se adhiere mediante zarcillos. Disfrutarás
de sus olorosas flores de color rojo y púrpura de junio a octubre.
Debe cultivarse a pleno sol y no aguanta temperaturas inferiores a
-1°C. Debe regarse moderadamente.
Ten
en cuenta….
Si tenes un balcón
abierto y quieres formar cascadas de flores que lo cubran, deja
colgar los tallos de estas plantas o entutoralos para que tomen la
forma del balcón y lo enmarquen, de manera que las flores enmarquen
las ventanas. Conseguirás un efecto de sombreado marco de flores
romántico y maravilloso.
Si deseas usar estas
plantas para cubrir una pared, la mejor manera de cultivarlas es en
una esquina soleada pero protegida, ya que podrán apoyarse en ambas
paredes y el tiesto podrá ser lo suficientemente grande para
permitir que sus raíces se expandan cómodamente sin ocupar
demasiado espacio.
Eso si ten en cuenta
que debes cambiar la tierra o la maceta en la que los cultives con
regularidad pues son plantas de crecimiento rápido consumen el
sustrato con rapidez.
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