¡Llegan los primeros fríos!

¡Por fin ha venido el frío!
En los últimos días el cambio de temperatura ha sido radical y el otoño ha entrado con fuerza en nuestras ciudades.  A la bajada de temperaturas, le ha acompañado unas lluvias que tanta falta hacían.  Si el tener poder disfrutar de largas estancias en el jardín es algo que vas a echar de menos hasta la próxima primavera, estos meses de frío y de descanso en el jardín son necesarios para que tus plantas recuperen sus fuerzas durante unos meses.  Hay incluso especies para las que el frío es necesario para correcto desarrollo

La mayor inclinación y menor fuerza de los rayos solares hace que durante estos meses las funciones biológicas de tus plantas estarán en suspenso, por lo que su crecimiento se vuelve muy lento o se detiene.  Este fenómeno afecta a prácticamente todas las plantas, incluso a las que tienes en el interior de tu hogar, por lo que si ves que tus plantas crecen menos no estás haciendo nada mal, están durmiendo.  Un error muy común en principiantes, es que al ver que sus plantas no crecen las riegan y abonan excesivamente creyendo que necesitan agua o nutrientes por el frío.  No es así, durante estos meses debes usar menos cantidad de fertilizante y agua, además de no tocar mucho la tierra.

También hay especies que durante estos meses necesitan cuidados especiales, como por ejemplo las azaleas, buganvillas (u otras plantas tropicales) o los geranios.

Muchas de las plantas se tornan amarillentas, señalando que se encuentran en hibernación.  Otras, como los bulbos, eliminan sus partes externas y se vuelven totalmente inactivas. Por ello es mejor que los desentierres y guardes protegidos hasta la próxima estación, pues en este estadio de inactividad pueden secarse o deteriorarse fácilmente.

Pero estos meses de fríos no significan que no puedas seguir disfrutando de tu jardín, hay multitud de especies que están adaptadas a las bajas temperaturas y que pueden aguantar heladas.  Coles ornamentales, ciclamen, pensamientos, acebos, hebe….adornarán durante estos meses tu jardín.  Y para las zonas más frías y expuestas de tu jardín hay algunas especies de bellas suculentas que sorprenden por su  fuerza de voluntad y ganas de vivir.  Muchas de ellas no hibernan y prosperan si tienen una buena luminosidad y suficiente agua, incluso enterradas entre la nieve. 

Si el invierno es tan suave como se espera, a mediados de enero, la mayoría de tus plantas  comenzarán a despertar y activarán sus funciones biológicas durante febrero para revivir en marzo, con el comienzo de la primavera.