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jueves, 17 de marzo de 2016

Bulbos, rodéate de primavera (parte II)

Fuete: http://www.verdeesvida.es
A cubierto, dentro de las casa puedes disfrutar de una técnica que aunque nació en el siglo XIX está de plena actualidad, los bulbos forzados. Con esta técnica, podrás cultivar tus bulbos en cualquier lugar o época del año. Conseguirás acentuar la belleza de cada una de las plantas por separado o en conjunto, creando sorprendentes y maravillosas composiciones.
No es una técnica fácil pero cuando la controles te dará grandes satisfacciones.
La clave del éxito con los bulbos de interior es planificar con anticipación y tener paciencia.

Prácticamente todos los bulbos de primavera necesitan un ambiente frío antes de comenzar a florecer. Los tulipanes, narcisos (excepto los narcisos blancos tipo Narcissus papyraceus o Narcissus tazetta.), jacintos, crocus, iris holandeses y los Jacintos del Perú requieren de 16 a 18 semanas de frío antes de que la flor esté completamente formada. Sin estas semanas de frío no se dará la respuesta bioquímica dentro del bulbo que provoca el desarrollo embrionario de la flor. Si se corta el tiempo de enfriamiento, las flores pueden llegar a surgir, pero atrofiadas y deformes

El cultivo forzado de variedades que no requieren de un período de enfriamiento para desencadenar la floración es mucho más sencillo, por ejemplo, los Amaryllis y los narcisos blancos de clima mediterráneo que están aclimatados a inviernos suaves.
Lo limitado de las especies que no necesitan enfriamiento, no es un problema, hoy en día en nuestro Centro de Jardinería disponemos de una abundante variedad de Amaryllis y Narcisos blancos que podrás disfrutar.

Forzar lo bulbos que requieren enfriamiento es una taréa más complicada
Para las floraciones de interior, los bulbos más fáciles de cultivar son los de azafrán, los jacintos, los muscaris (Nazarenos) y los mininarcisos.
Los tulipanes y narcisos estándar también se pueden forzar, pero requieren una atención más cuidadosa.

Puedes cultivar tus bulbos en maceta con tierra o directamente en agua.


  • Cultivo en maceta.

Las mejores macetas para ello, son las poco profundas, (10-15 cm de profundidad) para que así puedas dejar los 5 cm por debajo de los bulbos que requiere la raíz y dejar la parte superior de los mismos alineada al borde de la maceta. Así el efecto estético será mayor. Usa un sustrato universal.
Puedes plantarlos manteniendo separación entre ellos, pero quedarán más hermosos si los plantas a poca distancia (1-2cm) para conseguir que al florecer queden agrupados.
Planta sólo una variedad de bulbo por maceta, porque tanto la refrigeración como la floración suelen variar de un tipo a otro.
Después de sembrar, riégalos muy bien.
Si etiquetas cada una de tus macetas con el nombre de la variedad y la fecha de la siembra, recordarás que hay plantado en cada una de las macetas antes del periodo de floración. Así podrás ir colocando las macetas en su lugar definitivo.
Encontrar el lugar adecuado para enfriar tus bulbos de interior es generalmente el mayor desafío.
Una vez plantados, los bulbos deben mantenerse durante 16-18 semanas entre 2-7 ºC.
Si vives en una zona templada, donde la temperatura rara vez baja de los 2 ºC, puedes colocar las macetas húmedas bajo una capa de paja.
Si tu invierno es más frío, llegando a tener temperaturas inferiores a 2 ºC, coloca las macetas en una zona sin calefacción. Si puedes al exterior pero cuidando de que no les dé el sol.
Esta es una tabla orientativa que puede ayudarte.



Semanas de enfriamiento necesario
Semanas que tarda en florecer desde el nacimiento
Tulipanes
14-20
2-3
Crocus
15
2
Chionodoxa lucillae
15
2-3
Galanthus nivalis
15
2-3
Jacinto (Hyacinth)
11-14
2-3
Muscari
14-15
2-3
Narcissus
15-17
2-3
Scilla
12-15
2-3

Mantén el substrato húmedo, pero no mojado, durante todo el período de enfriamiento. Y además es Es muy importante mantener los bulbos en la oscuridad o pueden comenzar a crecer antes de que estén completamente fríos y florecer deformes.



  • Cultivo sólo con agua

Débes colocar los bulbos en un recipiente estrecho y poco profundo con agua. O un recipiente más ancho con piedras o cualquier otro elemento que pueda sostener el bulbo y sus raíces. Comprueba siempre que estos elementos estén tratados para no generar moho al estar dentro del agua. Cualquier contaminación del agua matará al bulbo. El agua debe no debe cubrir más de la cuarta parte inferior del bulbo, poco más de las raíces.
En unas cuatro semanas, disfrutarás de las flores
Para ayudar a mantener los tallos cortos y robustos, colócalos en un primer momento en una zona con luz indirecta y una temperatura de unos 10ºC, déjalo allí las dos primeras semanas, luego, pásalo a una zona más cálida y con luz más brillante.


Una vez que lo hayas conseguido puedes comprar un par de docenas de bulbos y guárdalos en un lugar fresco y seco. Si fuerzas unos pocos cada pocas semanas obtendrás floraciones escalonadas y disfrutarás de ellos en todas las estaciones.

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